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La Acupuntura en el Verano Tardío (1 de 2)

Ago 31, 2015 | Acupuntura MCh, Clásicos MCh, Dietoterapia

La Acupuntura en el verano Tardío (1ª parte)

El Elemento Tierra corresponde, en el círculo, a la proyección del Centro de observación entre los cuatro puntos cardinales.

Esta proyección coloca el Elemento Tierra entre el Fuego, en el verano, y el Metal, en el otoño. Es lo que llamamos el ¨verano tardío¨ o el ¨verano indio¨.

El ¨verano tardío¨, una ¨estación¨ relativamente corta, poco reconocida, ocurre aproximadamente el último mes del verano y se encuentra en medio del año chino (el año chino comienza en febrero, con una ligera variación del día exacto cada año).

Es el punto de la transición del Yang al Yin, está en las fases expansivas del crecimiento de la primavera y del verano y de las estaciones internas, más enfriadoras, más misteriosas del otoño y del invierno.

El Elemento Tierra tiene una fuerte influencia en los quince días circunvecinos a cada uno de los dos equinoccios y de los dos solsticios (7½ días antes y después).

Estos días son los protectores neutrales entre las estaciones, que cambian en los equinoccios y en los solsticios. Estos periodos de intercambio representan pausas fundamentales en los patrones de luz que experimentamos del sol, el centro de nuestro sistema solar.

Los quince días circunvecinos a los equinoccios y a los solsticios suman sesenta días. La adición del mes del verano tardío, que ocurre simultáneamente en el último mes del verano, le da al Elemento Tierra un dominio sobre el mismo número de días de los otros elementos.

Este periodo corresponde a los quince días rituales durante los cuales el Emperador de China, vestido de amarillo, el color del Elemento Tierra, residía en el palacio central. En los textos antiguos podemos leer: ¨Si el soberano quiere animar el espacio, debe ocupar el puesto real (en centro). Desde este lugar parece animar el tiempo: ha dado un centro al año¨.

La Tierra está representada por dos trigramas: Tierra (lo receptivo) y la Montaña.

El trigrama que representa la Tierra está relacionado con la madre que nutre, con nuestra Madre Tierra.

Simboliza la igualdad, porque la Tierra no tiene preferencias ni rechazos, como una buena madre con respecto a cada uno de sus hijos.

El trigrama que representa la Montaña está en la posición opuesta al trigrama Tierra. Se sitúa al final del año, entre la terminación del invierno y el principio de la primavera, periodo del año en que el Elemento Tierra también se manifiesta.

Pero tanto en un caso como en el otro (final del verano o final del invierno), se trata de una pausa después de las estaciones más extremas, el Yang del verano o el Yin del invierno.

La Montaña simboliza la quietud, la inmovilidad, el arraigamiento necesario para que se cumpla el principio y el final de todo lo que vive en la Tierra.

El clima es húmedo (energía de la Tierra), suave, templado, agradable; no tenemos ni frío ni calor, nos sentimos a gusto, sin el agobio después de los fuertes calores. Es como si el tiempo se detuviera y las actividades se hicieran sin esfuerzo, como si viviéramos en un sueño. Encontrar los ritmos y los ciclos que hacen la vida simple y armoniosa.

Los frutos maduros que no se han recogido caen al suelo. El olor de la Tierra es el perfumado, como la estación que este Elemento representa y durante la cual los frutos, ricos en olores y sabores, se recogen en su plena maduración antes de que sea demasiado tarde. Nuestros antepasados decían: se acerca el momento de llenar los graneros y prepararnos para la llegada del frío.

Las relaciones principales del Elemento Tierra definidas por la Medicina interna clásica son las siguientes:

Las fuerzas misteriosas de la Tierra crean humedad en el Cielo y un suelo fértil sobre la Tierra; crean la carne del interior del cuerpo, del Estómago y el Bazo Páncreas. Crean el color amarillo… y le dan a la voz la capacidad de cantar… éstas crean la boca, la saliva y el sentido del gusto, el sabor dulce y las emociones de la ansiedad y de la preocupación.

Los órganos relacionados con el Movimiento Tierra, el Bazo-Páncreas y el Estómago, son principalmente responsables de la digestión y de la distribución de los alimentos y de los nutrientes. La energía Qi y otras esencias que se extraen de la digestión son utilizadas por el cuerpo para crear la energía Qi Wei (inmunidad), la vitalidad, el calor y la formación de los tejidos y de las funciones mentales.

Encontramos una descripción análoga de la digestión en la medicina tradicional india, llamada ¨Ayurvédica¨ , a nivel del chakra manipura, el centro energético situado en el plexo solar. Estos dos órganos (BP/E) son la base de lo que los chinos llaman la ¨energía postnatal¨, o ¨energía nutritiva¨ o también ¨energía Rong-Yong¨.

Las personas con señales de desequilibrio del Movimiento Tierra, se caracterizan por un cansancio crónico, estancamiento físico y mental, y comportamiento compulsivo, ¨estancado¨ que les impide creativamente desarrollar sus personalidades. Tienen típicamente una digestión débil, hinchazón o abultamiento abdominal, debilidad de brazos y piernas, tez pálida…

Aparentemente, al Bazo no le corresponde ninguna emoción. Su actividad mental es la del Pensamiento, la Reflexión. Como el elemento con el cual está relacionado (Tierra), se sitúa en el centro: entre la Alegría del Sur (Fuego) y el Miedo del Norte (Agua), entre la Ira del Este (Madera) y la Tristeza del Oeste (Metal). El Bazo templa estos movimientos emocionales a través del PENSAMIENTO. Ayuda a tomar la distancia necesaria, a medir, a sopesar los pros y los contras.

El exceso de preocupación y las contrariedades alteran la energía del Bazo. Cuando uno rumia demasiado sin encontrar la solución a los problemas, cuando sufre ¨surmenage¨ intelectual, como el estudiante en el momento de los exámenes, el Bazo padece las consecuencias.

La capacidad para pensar está apoyada en un humor básico bastante alegre. En caso de vacío, aparece la indiferencia acompañada de distracción, apatía, incluso con ideas fijas u obsesiones. En algunos casos, el exceso de reflexión puede oponerse a la acción, porque el sujeto es incapaz de tomar una decisión, otro efecto del desequilibrio energético del Bazo.

La virtud taoísta que permite salir de esta situación es la confianza en uno mismo, la fé.

Feliz Verano Tardío (Transición del Yang al Yin)

Bibliografía consultada:

  • Canon de medicina interna del Emperador Amarillo (Líng Shû)
  • Canon de las Dificultades (Nán Jing)
  • Medicina China ¨Guía para tu bienestar¨ Yves Requena y Marie Borrel
  • Sanando con alimentos integrales -Tradiciones asiáticas y nutrición moderna. Paul Pitchford

 

La Acupuntura en el Verano Tardío (2 de 2)

Autor de publicación

José Luis Alabau Escolano

DIRECTOR Y FUNDADOR de la EAM
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